Que
mes a mes bajen las existencias es lo normal, por poco o mucho que se venda,
irán descendiendo, lo que tenemos que analizar es el ritmo y si serán
suficientes estas bajadas para la comercialización de la cosecha actual
Según el
infovi, y cerrando el año natural, a 31 de diciembre teníamos unas existencias
de vino y mostos sin concentrar, de 57,4 millones de hectólitros, si vemos que
a últimos de noviembre teníamos 60,65, resulta que en el mes de diciembre ha
bajado en 3,25 millones de hectólitros estas existencias.
Es
cierto, antes de seguir analizando números, que diciembre es un mes en el que
salen muchas existencias de bodegas para el consumo interno ya que son las
navidades, fechas de consumo elevado de vinos.
Es por
esto quizá que en Mancha, por ejemplo, ha salido 1,62 millones de hl. La mitad,
aproximadamente, de lo que ha salido en toda España, y aun siendo la comunidad
que más ha visto reducido sus excedentes, no veo que sea cantidad suficiente
para, a ese ritmo, quitarnos mucho vino.
Esta
cantidad de vino debe de subir, incrementando sobre todo exportaciones, para
poder decir que comercializaremos la cosecha sin excesivos problemas.
Aparte de
esto, creo que con un poquito más de esfuerzo, y si las tornas cambiaran,
aunque fuera un poco e incrementáramos estas exportaciones, si podríamos mirar
el futuro con más optimismo. Me explico, a grandes rasgos y sin refinar
números, al empezar la campaña teníamos unas existencias de 30 millones de hl.
(Ya digo que aproximadamente, por hacer números redondos) si comenzamos el año
con 57 millones, resulta que nos quedan por comercializar, para hacer la
cosecha completa, unos 27 millones de hl. ¿Seremos capaces de comercializar
estos 27 millones de hl. hasta el 31 de julio? esta es la pregunta y la
respuesta, como siempre, nos la darán los datos de exportaciones, tan flojos en
esta campaña al menos hasta ahora.
Si
hacemos comparaciones, la verdad es que los números se ponen cuesta arriba, ya
que en 7 meses (tomando desde principio de año a que se refieren los números),
tenemos que vender 27 millones, mientras que en los anteriores 5 hemos vendido
15, teniendo, además, la vendimia y principios de campaña por medio que es
cuando más se suele vender.
Es
difícil, pero no imposible, lo que pasa es que nos va a costar mucho recuperar
las ventas que hemos perdido. Lo que nos tiene que hacer pensar es por qué y
por quien o quienes, hemos perdido esas tan importantes ventas y que nos sirva
de escarmiento y experiencia para otros años, en los que habrá que huir de
consejos un tanto “interesados” por ponerles un calificativo. Los nombres, como
es natural, que los ponga cada cual.