viernes, 22 de abril de 2016

Coyuntura vitivinícola mundial: evoluciones y tendencias


El artículo de esta semana, no es tal, ya que les copio lo expuesto por El director general de la OIV, Jean-Marie Aurand esta pasada semana, datos muy importantes e interesantes del viñedo y el vino, en el ámbito mundial

 En 2015, el tamaño del viñedo mundial alcanzó los 7534 mha.
En China, la superficie vitícola continuó aumentando (+ 34 mha) y se confirma como el segundo viñedo mundial.
· La producción mundial de vino aumentó un 2,2 % con respecto al año anterior, lo que representa 274,4 Mill. hl en 2015.
· Desde la crisis económica de 2008, el consumo mundial de vinos se ha estabilizado y se estima en 240 Mill. hl en 2015.
· Los intercambios mundiales de vino siguen aumentando en volumen, pero sobre todo en valor: 104,3 Mill. hl (+ 1,8 %), 28 300 Mill. EUR (+ 10,6 %).
El director general de la OIV, Jean-Marie Aurand, presentó el 18 de abril en la sede de la Organización, en París, los elementos informativos sobre "el potencial de producción vitícola, el balance de la cosecha y la situación del mercado y los intercambios internacionales en 2015".
Evolución del viñedo mundial: ligera contracción de 7000 hectáreas Principalmente en China y en Nueva Zelanda los viñedos continúan creciendo.
En cambio, el viñedo comunitario sigue disminuyendo ligeramente (- 26 mha entre 2014 y 2015). España permanece, sin duda, a la cabeza en lo que respecta a superficies cultivadas con más de 1 millón de hectáreas (1,021 Mill. ha), delante de China (0,82 Mill. ha) y de Francia (0,78 Mill. ha).
 Producción mundial de vino: alza de 5,8 Mill. Hl La producción mundial de vinos (excluyendo zumos y mostos) fue relativamente alta en 2015. Alcanzó los 274,4 Mill. hl, es decir, + 5,8 Mill. hl con respecto a la producción de 2014. Italia, con un crecimiento del 12 % respecto al año anterior, es el primer productor mundial (49,5 Mill. hl), seguida por Francia (47,5 Mill. hl) y España (37,2 Mill. hl).
Estados Unidos registra, por tercer año consecutivo, un nivel de producción elevado (22,1 Mill. hl). En el hemisferio sur: la producción (excluyendo zumos y mostos) se contrae en Argentina (13,4 Mill. hl), aumenta en Chile (12,9 Mill. hl) y se mantiene estable en Australia (11,9 Mill. hl).
La producción disminuye ligeramente en Sudáfrica (11,2 Mill. hl) y en China (11 Mill. hl). Consumo mundial de vino: ligera alza en 2015 El consumo mundial de vinos en 2015 se ha evaluado en 240 Mill. hl, lo que implica un leve aumento (+ 0,9 Mill. hl) con respecto al año anterior.
Desde la crisis económica y financiera COMUNICADO DE PRENSA de 2008, se mantiene estable: Estados Unidos, con 31 Mill. hl, confirma su posición de primer consumidor mundial. El consumo se presenta relativamente estable en Italia (20,5 Mill. hl) y en España (10 Mill. hl), pero en Francia sigue cayendo (27,2 Mill. hl) respecto al de 2014. El nivel de consumo mundial en China se ha evaluado en 16 Mill. hl, lo que implica un ligero aumento (+ 0,5 Mill. hl) con respecto a 2014.

Intercambios internacionales: incremento en volumen y en valor En 2015, los intercambios mundiales de vino han aumentado un 1,8 % en volumen (104,3 Mill. hl), pero en valor aún más (un 10,6 %) con respecto a 2014 (28 300 Mill. EUR). 

viernes, 15 de abril de 2016

Datos definitivos de cosecha. Este año acertamos de lleno…

Datos definitivos de cosecha.
Este año acertamos de lleno…
Como siempre tarde, muy tarde, el Ministerio nos ofrece lo que da en llamar datos definitivos de cosecha de la vendimia 2015. 42.001.260 Millones de Hectólitros
Quiero empezar este articulo y no es que quiera colocarme medallas, pero es lógico sentirme orgulloso del dato que les comento a continuación. Y es que con fecha 27 de octubre, en el artículo semanal que les escribo (lo pueden ver en esa fecha), comentaba lo siguiente:
“Si esta campaña tendremos, sobre 42 millones de hl (no es dato oficial, lo pongo cómo ejemplo, aunque estará por ahí)”
Cuando ayer leía que los datos oficiales daban 42,00 millones de hectólitros, pensé que la verdad es que este año había acertado de lleno, lo había clavado. También comentarles a los que, creo que voluntariamente, intentan distorsionar estos datos, de manera partidista y que cada año engañan con las cantidades. Sabemos que no es fácil, pero el cálculo, aunque puedas errar, se puede hacer más aproximado. Hay que tener en cuenta que la merma con respecto al año anterior ha sido del 3%. Y si hacen memoria o tiran de hemeroteca, pueden ver, lo recuerdo perfectamente, quien daba mermas superiores al 30% y se escucharon algunos, en algunas zonas que daban la mitad o más de merma.
Esta gente no ayuda en nada a los mercados, intenta manipular y distorsionar la realidad y lo único que consiguen es que, quien se deja engañar, puede hacerse unos cálculos totalmente falsos y que le cueste la broma mucho dinero. También hubo quien cifró la cantidad de cosecha muy por encima de lo que ha sido en realidad. Cada año desde El Correo Del Vino, denuncio, en primer lugar la tardanza en darnos los datos definitivos por parte del ministerio. Esperemos que con las nuevas formas de declarar implantadas, se nos den antes. De todas formas, si la declaración definitiva se hace el día 10 de diciembre, no es lógico que nos den los datos el 8 de abril, con los adelantos de hoy día y ya que se presentan informáticamente, nos los podrían dar prácticamente al instante. Seguiremos denunciando esta anomalía que afecta enormemente al mercado y a las previsiones que se pueden hacer todo el sector.
También denunciamos, año tras año, lo que antes les comento y son los datos falseados y manipulados que por parte de algunos sectores se intentan introducir en el mercado, dando cantidades falsas al alza o a la baja según sus intereses.

Bueno, continuando con el tema de la cosecha, decirles que el dato de la cantidad total de cosecha de  42.001.260, se desglosa en 37.219.176,74 de vino y 4.782.084,39 de mosto. Los datos completos los pueden ver o descargarse desde esta página:


Manzanares 11 de abril de 2016

viernes, 8 de abril de 2016

Los franceses siguen vertiendo nuestro vino


Lo habrán oído todos ustedes, hace un par de días pararon a cinco camiones de vino, con destino a Austria, dos de ellos los vaciaron completamente, los otros tres, en parte, y pintaron las cisternas con espráis.

La costumbre de no seguir la legalidad desde hace años, la tenemos siempre que pagar los españoles y ya está bien. La libre circulación de mercancías es algo reconocido y autorizado en toda la Unión Europea, y se debería de tomar medidas, las necesarias y precisas, para que ese derecho que tenemos todos los europeos se cumpla.

Esta vez, incluso, tuvieron la desfachatez de parar los camiones, y entonces llamar a la prensa y la televisión, para que fueran testigos presenciales del vertido ilegal de nuestro vino. Para más inri, la policía francesa estaba presente y al no intervenir, consintió la comisión del delito ante sus propias narices.

La queja de los agricultores franceses es la “posible” bajada de precios de su vino, un vino que ellos venden a 70-80 euros hectólitros y que España vende a 30 ó 40 euros hectólitro. Como si nosotros tuviéramos la culpa. ¡Ojalá nos compraran a nosotros el vino a 80 euros!, les aseguro que somos los más interesados de que se cumplan esos precios. Por tanto es absurdo lo que hacen-
Un vino, además, que no era para ellos, no era competencia directa ya que no era para Francia, su destino era Austria. Lo que pasa es que cuando la masa y la chusma se desmadran, y las razones se quieren imponer por la fuerza debido a una manifiesta incultura, dialogar e intentar entrarlos en razones es, por supuesto, imposible.

Ahora vendrán propuestas, quejas diplomáticas y, como siempre, quedará en nada. El susto a los camioneros, trabajadores que solamente cumplían con su obligación y encargo, la perdida de dinero y tiempo, eso, nadie lo recordará en unos días y de nuevo la barbarie de nuestros vecinos, campará a sus anchas, aunque, como siempre, no valdrá de mucho o de nada.

Nosotros, también como siempre protestaremos durante unos días y tampoco pasará nada. No le hemos hecho boicot a sus productos en los supermercados, o simplemente cerrar las grandes superficies de alimentación dominantes en España y que son de capital francés.

Y seguiremos aguantando que por su falta de grado, adulteren artificialmente sus vinos con azúcar, campaña que deberíamos hacer a nivel mundial, diciéndole al mundo entero que los vinos franceses no son naturales como los españoles, que los adulteran artificialmente echándoles un producto diferente y que no proviene de la uva, como es el azúcar, mientras que nuestros vinos son totalmente naturales y procedente íntegramente de uva.
No estaría de más, comenzar por estas cosas y que a los españoles se nos oyera también decirles estas cuatro verdades a quienes consienten, arropan y disculpan que los actos vandálicos predominen antes que la legalidad.


viernes, 1 de abril de 2016

Los Medalleros


Hay días, semanas, meses, vamos, casi es ya continuo, que lluevan medallas y medallas en concursos de vino, catas, colectivos, ya casi cualquiera apaña un concurso y se lía a dar unas medallas.
Ni va este artículo contra los concursos, ni contra las medallas, y mucho menos contra los vinos.

Reflexionando hoy día si no tienes una medalla, no eres nadie en este mundo de los vinos, si tienes varias mejor, y los premios y reconocimientos son cada día más numerosos. Lo que pasa es que los malos, desprestigian a los buenos. No basta con juntar a cuatro amigos y montar un concurso y repartir medallas ya que se termina por devaluar las que realmente son meritorias de concursos serios y formales, que los hay, y más que de los otros, no cabe duda.

Hay varias cosas, sin embargo, que creo merecen la pena resaltar. En primer lugar la calidad de los vinos, que indudablemente va en aumento y por tanto son merecedores, con total mérito, de esa medalla.

Cómo es lógico y muchos consumidores (de los que ya hablaremos) no lo saben, no se da una medalla de oro, una de plata y otra de bronce, ya que al ir por nivel de puntuaciones, puede y hay, decenas de oro, de plata y de bronce, y es difícil, muy difícil, que con el actual modo de puntuar, un vino que se presente a un concurso, no alcance puntuación suficiente como para que se le otorgue, repito que merecidamente, una medalla, sea de un metal u otro.
Ya he comentado en más de una ocasión que el baremo de puntuación es muy estrecho, a pesar de puntuar sobre 100. Y entre, por ejemplo, 86 y 90 puntos hay una cantidad excesiva de vinos, con unos diferenciales de calidad muy por encima de cuatro centésimas. Pero este es otro tema. El caso es que si la medalla de bronce se establece en superiores a 80 puntos. Va a haber muy pocos vinos que estén por debajo de esos 80 puntos. Así vemos esas listas interminables de vinos premiados, folios y folios con las consabidas medallas de bronce, plata y oro, menos, es normal, de gran oro.
Algunos concursos, con buen criterio han eliminado las medallas de bronce, con lo que quita muchos vinos del medallero, dándole mayor prestigio a quien obtiene medalla. Y sitúan la plata por encima de 84 puntos, que aunque así eliminan bastante, también es cierto que entran muchos de ellos dentro del medallero.

Y si esto nos abruma y nos parece raro a los que estamos en el mundo del vino y al menos nos creemos que entendemos algo de vino, imagínense ustedes a los aficionados, neófitos o simple consumidores, que les habla de que un vino ha sido premiado, que tiene tal o cual medalla, y te mira casi como diciéndote “como todos”. Y es que exceptuando recomendaciones muy puntuales de algún gurú del vino, le dan poca importancia a que un vino u otro tengan o no tenga en su haber el medallero más o menos extenso.
Y lo raro o malo, según se vea es que esta sensación ha cambiado en apenas unos años, recuerdo hace apenas una decena o dos de años, que el que un vino tuviera una medalla, era realmente alabado por toso, era un mérito digno de resaltar, más cuando los vinos españoles comenzaron a presentarse a concursos internacionales y venían del extranjero con su flamante medalla, la cual ponían, orgullosos, en su etiqueta, cosa que hoy, por su abundancia, es difícil de encontrar.
Y creo, así me parece, que los concursos los sabemos apreciar más los “entendidos “del vino, los que estamos en este mundillo, que el consumidor. Esto se debe a que nosotros sí sabemos distinguir y apreciar una medalla en un concurso de prestigio, de una medalla conseguida en… digamos otros concursos…

Y valoramos, como digo, que un vino sea premiado en no más de dos o tres concursos, realmente meritorios, y apreciamos y nos felicitamos de ello y sabemos que si catamos ese vino, respaldado por esa medalla, estaremos ante un vino que lo merece, luego hay otros concursos, esos que se montan como rosquillas y por cualquier evento o circunstancia, a los que, personalmente creo, no merece la pena ni hacerle caso ni entretenerse en ellos. No dicen nada. Y creo que las marcas que quieran conseguir prestigio merecido se debían de pensar muy mucho acudir a ellos.